¿Por qué son malas las redes sociales?
Las redes sociales nos ayudan a conectar con las personas que están lejos, a encontrar al amigo que no vemos desde la escuela, a difundir rápido cualquier tipo de informacíon, o a saber que sucede en las cuatro esquinas del mundo de forma instantánea; pero hay una parte muy negativa de la que se habla poco, quédate y entérate.
Las redes sociales funcionan basadas en la teoría de las redes sociales, estas teorías fueron fundamentadas mucho antes del surgimiento del internet, y para establecerse, sus creadores observaron la forma en que se relacionaban los individuos dentro de la sociedad.
Con el surgimiento de internet y plataformas como MySpace y Facebook, millones de personas comenzaron a agruparse dentro de comunidades virtuales. Después con el avance de la inteligencia artificial y los sistemas clasificadores y recomendadores de contenidos, nuestra interacción dentro de esas plataformas pasó a estar regida por estas tecnologías.
El problema con estos algoritmos y sistemas recomendadores es que generan burbujas de confort, siempre te recomendarán contenidos alineados con lo que tú crees, y gente que piensa como tú. El objetivo es aumentar tu fidelidad y tiempo de conexión en esas plataformas, pero lo malo es que leer criterios que siempre refuerzan tu concepción sobre la vida y la sociedad, generan la ilusión placebo de que mucha gente piensa como tú. No importa si piensas que la tierra es redonda o plana, o si eres pro vacunas o estás en contra de las vacunas, estos algoritmos se encargarán de conectarte con mucha gente que está alineada a tu corriente de pensamiento y mostrarte contenido que apoya esa corriente, generando en ti la ilusión de que tienes la razón, porque tanta gente no puede estar equivocada.
Es lo que llaman sesgo de confirmación, o sea que tu cerebro pondera la información que apoya lo que crees, y castiga lo que esté en contra. Lo cierto es que analizar puntos de vista diferentes es lo que te permitirá crecer en el plano intelectual.
Por último, te comento que existen algunas excepciones, como ejemplo te puedo mencionar a Boukker, que es una red social para los amantes de la literatura que estimula a la creación y a la lectura. Boukker tiene una particularidad muy importante, su inteligencia artificial Kathe recomienda contenidos no solo basándose en la popularidad o categorías que lees, principalmente lo hace basándose en las emociones que te generaron tus lecturas anteriores, lo cual es un enfoque muy novedoso.
Acá les dejo un documental super interesante sobre el tema:
Hasta un próximo post.
